Los seres humanos recibimos estímulos de otros seres con los que compartimos la vida y del entorno que nos rodea. Estos estímulos pueden ser: olores, sabores, imágenes, temperatura, sonidos, otros. Son “señales” de que algo se modificó. El cuerpo debe dar respuesta a estas señales. Lo hace mediante la función de relación y coordinación con el medio. Vamos a explicar un poco más.
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